Microblogs, un filón para fidelizar la imagen de marca

Hace poco leí en Seguílaflecha una definición del fenómeno de los microblogs, que los describía como “una mezcla entre un blog parco, un mensajero en diferido y un repositorio de ideas que no siempre merecen un desarrollo mayor, pero que igualmente se desean compartir”.

La proliferación de minibitácoras en España es evidente con la popularidad que vienen alcanzando sitios como Khaces, que agrupa a los usuarios del microblogging o nanoblogging por ciudades y provincias; Jisko, al que se accede por invitación; Sweetter, el más pequeño con cerca de 200 usuarios; Pownce y Xmensaje, estos dos últimos extranjeros, y Twitterespaña, que es un recopilatorio de los textos insertados por los españoles registrados en Twitter.

Pues bien, a pesar del éxito que acompaña a estos espacios, algunos de los cuales alcanzan la cifra de los 40.000 usuarios, y del enganche obtenido por bloggers españoles de la talla de Enrique Dans o Eduardo Arcos y personajes internacionales como el candidato demócrata a la Casa Blanca, Barack Obama, son muy pocas las empresas españolas que aprovechan el fenómeno y tirón del microblogging para llegar al corazón de sus consumidores y fidelizar clientes.

Y es extraño que a los seguidores de Zara, Purificación García o la marca automovilística Seat, por poner algunos ejemplos, no les interese seguir el “momento a momento” de sus marcas favoritas.

Por último, hace unas semanas, el suplemento dominical del diario El País recogía un decálogo recomendado por el cofundador de Khaces, Guillermo Baches, para los nuevos iniciados en el nanoblogging:

1. Escribe desde cualquier lugar y a cualquier hora, desde tu portátil o dispositivo móvil conectado a Internet.

2. Sincroniza tu microblog con el máximo de sitios posibles para tener mayor difusión.

3. Añade a tu blog o web un enlace a tu microblog.

4. Lanza a menudo preguntas y respuestas para crear interacción.

5. Sigue los microblogs de tus amigos y sé fiel a tus seguidores.

6. Entra en el juego de las conversaciones haciendo comentarios en los que respondas directamente a otros.

7. Envía enlaces de artículos interesantes o páginas web.

8. Sé educado.

9. No seas demasiado crítico con los puntos de vista de otros.

10. No uses tu microblog solo para promocionar tu blog o proyectos.